El asertivo Información
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Los engaños en los anaqueles de las tiendas son muchos, y debemos estar prevenidos para ello.
Uno de los más comunes, en cuestiones de marketing, está en aquellos que en apariencia son ecológicos, o amigables con el medio ambiente. Por ello es importante que se identifiquen pero, ¿Sabes cómo?
Si es verde, no necesariamente es ecológico
Por lo general son aquellos que utilizan términos ambiguos para venderse como un ilusorio. Entre ellos encontramos artesanal, natural, casero, y/o tradicional. Estos términos no significan en forma, que hablemos de un producto ecológicamente responsable.
Otro término engañoso, es cuando nos dicen que el producto está libre de CFC (clorofluorocarbonados), que dañan a la capa de ozono. Sin embargo, están prohibidos desde hace décadas en la mayoría de los mercados, por lo que, aunque es importante, no deberíamos preocuparnos por ello.
En cambio, cuando encontramos términos como los siguientes términos como: ecológico; bio o biodegradable; o incluso orgánico hablamos de uno que en definitiva se preocupa por el ambiente, ya que legalmente hablando si utilizan estos términos sin serlo, entonces incurren en un delito.
Ademas, al analizar la situación del empaque y o producto, muchas especificaciones son relativamente falsas, cuando nos hablan de productos ecológicos, sin serlo.
En ocasiones, lo orgánico es el producto, pero no el empaque, o viceversa (sobre todo en materia de detergentes -por ejemplo-), cuyo empaque podría ser ecológico, pero no necesariamente el contenido o producto.
Ahora, depende de cuánto revises el empaque. Muchos logotipos de identificación podrían ser falsos, por lo que el mayor “asunto” para los consumidores, está en leer a detalle los empaques.
